UN CAMBIO RADICAL

Ha sido como el rastro de la serpiente sobre la roca, y el rastro del hombre en la doncella. Es una paradoja experimental que, sin darnos cuenta, el mundo cambi ó delante de nuestros ojos. Algo semejante a lo dicho por el Señor “porque viendo no ven, ni oyen con los oídos” Lo cierto es que el mundo no es el mismo que hace dos a ñ os. Ha sido como el rastro de la serpiente sobre la roca, y el rastro del hombre en la doncella. Difícil de percibir, de observar, pero los resultados pronto se hacen visibles y entonces nuestros ojos se abren a una realidad hasta entonces desconocida. Una realidad que ya no necesita ser profetizada, sino que por el contrario, confirma lo que había sido anunciado; la manifestación del hombre de pecado, el hijo de perdición que se opone contra todo lo que se dice Dios, o es objeto de culto. Ha sido lánguida y gradual su lenta revelación, casi imperc...