REOS DE MUERTE
¡ay de aquel hombre por quien viene el tropiezo! ¿ Alguna vez ha pensado que usted es, o puede ser, una piedra de tropiezo? Lo de la piedra de tropiezo es una metáfora que ilustra cómo podemos llegar a serlo por medio nuestra mala conducta, llegando a ser un estorbo aun para la niñez y los adolescentes. Cuando Jesucristo enseñaba, muchos se burlaban de él e impedían que otros escucharan. Ante este escenario, advirtió que “es imposible que no vengan los tropiezos.” Y de esta manera debemos entender que los tropiezos siempre van a existir. Tropiezos que pretenden sabotear una sana doctrina, (por ejemplo: El Evangelio). E igual sucede con aquello que contribuye a la edificación de una vida. Nunca faltará quien se oponga. Acerca de todo aquel que sirve de “piedra de tropiezo” Jesucristo dijo que mejor les fuera que se les atase al cuello u...